Eso sí, si estás en
momentos de cuidado del peso o te interesa bajar muchos kilos por la situación
que sea, controla su ingesta.
¿Analizamos algunos de sus beneficios?
En primer lugar puede ayudarnos a mejorar los niveles de colesterol y estabilizar el ritmo cardíaco gracias a los más de 20gr por
pieza de grasas monoinsaturadas (bajan el colesterol malo y suben el bueno, son
las llamadas grasas buenas) con
grandes cantidades de ácido oleico y alfa-linolénico (ácido graso omega-3, el cual además de también bajar el colesterol
malo, es bueno para las enfermedades coronarias, el cáncer, las
articulaciones inflamadas e, incluso, para el eczema y la depresión).
Por otro lado el
aguacate tiene una importante cantidad
de fibra, esto hace que – además de su misión reguladora – aumente la sensación de saciedad ya que ralentizará la descomposición de hidratos de carbono y
la gran cantidad de ácido oleico que activa la zona del cerebro que te hace
sentir lleno/a.
El aguacate tiene luteína una
proteína que tenemos en el ojo y que mejora su sistema inmunológico fundamental
para evitar problemas como la presbicia o vista cansada.
¿Aguacate y entrenamiento?
Sin duda es una pareja que pueden ir de la mano.
Analizando las características y siguiendo las
recomendaciones el aguacate es especialmente recomendado para después de entrenar
y es que su alto contenido en proteínas le convierte en un recuperador nato favoreciendo la reconstrucción muscular. Úsalo principalmente tras entrenamientos
de alta intensidad o duración.
Además tiene unas dosis muy altas de zinc y potasio, de
éste último tantas como el plátano y ya sabemos el papel regenerador a nivel
muscular del potasio.
Destacamos la importante presencia de Vitamina E, un
antioxidante perfecto para proteger nuestras células de los radicales libres.
¿Cómo comerlo? Una
receta
Hay múltiples maneras de comer aguacate aunque ahora
que llega el verano la mejor puede ser a través de la ensalada. Te proponemos una muy sencilla pero que te hará recuperar
toda tu energía para enfrentarte a nuevos retos, divertida, sencilla y
saludable.
Corazón sin TENSIones (ensalada para 2)
Prepara en tu plato una base de “verde”, principalmente
espinaca cruda pero puedes echarle lechuga, escarola o similar.
Añade salmón (puede ser ahumado, amarinado o cualquier
otra forma que conserve sus propiedades, mejor sin freír, ni pasar por plancha)
en cantidad al gusto.
Añade un aguacate troceado
Finalmente, y bien picaditas, 4 nueces.
¿El toque? Alíñala con aceite de oliva con un toque al limón
o con aceite de oliva “normal” pero exprime un poquito de limón para potenciar
el aliño (no es necesario ningún tipo de vinagre, pero úsala al gusto)
Tómala bien fresquita después de entrenar y estarán
cuidando tu corazón. Disfrútala!!
Webgrafía:
vitonica.com
consumer.es
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